Proyectos

La clienta nos contactó con el objetivo de transformar su cocina, que presentaba un aspecto anticuado y carecía de luz y calidez. Además, deseaba una renovación completa sin realizar obras mayores, manteniendo la distribución original pero con un diseño más moderno, funcional y acogedor.

Para transformar la cocina sin necesidad de realizar obras, apostamos por cambios sutiles pero efectivos que aportaron una mayor luminosidad y frescura al espacio. Mediante una cuidada selección de elementos decorativos y colores estratégicos, logramos renovar por completo el ambiente, manteniendo la distribución original.

Los tonos neutros como el beige y el blanco fueron clave para potenciar la luz natural y crear una sensación de amplitud. Combinados con detalles en verde, conseguimos aportar vitalidad y calidez, equilibrando funcionalidad y estética en un espacio completamente renovado.

El resultado final es una cocina completamente renovada, luminosa y acogedora, diseñada para ser el corazón del hogar. Lacamos todas las puertas de los muebles en un tono claro que potencia la luz natural y moderniza el espacio. La encimera fue reemplazada por una de mayor grosor en un elegante tono beige, que aporta calidez y sofisticación. Además, instalamos un fregadero más amplio y funcional, ideal para el día a día de la familia.

Para mejorar la iluminación, incorporamos luces cálidas en la parte inferior de los muebles altos, creando un ambiente agradable y práctico en las zonas de trabajo. En la zona de comedor, diseñamos un banco a medida tapizado en tela de toile de jouy, acompañado de sillas en borrego, que aportan textura y confort. La mesa de microcemento se integra perfectamente en el conjunto, creando un espacio contemporáneo y funcional, ideal para reunir a la familia y disfrutar de momentos inolvidables.